El tenista profesional ruso, Andrey Kumanstov, ha sido declarado culpable de haber participado en una red de apuestas deportivas ilegales, por lo que queda suspendido de por vida para la práctica del tenis, además de no poder asistir como espectador a ningún partido oficial de ese deporte. Dicha sentencia será aplicada de forma inmediata.
La TIU (Unidad de Integridad del Tenis), formada por responsables de la ATP, la WTA la FIT y el COT, es el organismo encargado de investigar los casos de corrupción dentro de este deporte, tomó la decisión de expulsar al tenista de 27 años después de haberle encontrado culpable de, al menos, 12 delitos de corrupción deportiva entre los años 2010 y 2013.
Andrey Kumanstov apenas consiguió alcanzar el puesto 261 en el ranking de la ATP en el año 2010, la clasificación más alta de su carrera, además, en lo que va de año no ha jugado ningún partido y sus ganancias por jugar al tenis profesional ascendieron a los 103.856 dólares. Los detalles sobre cómo Andrey Kumanstov efectuó las apuestas ilegales aún se desconocen.
El caso del ahora ex-tenista ruso no es una situación aislada. Según diversos informes del 2013 elaborados por la ESSA (Asociación Europea de Seguridad Deportiva), el tenis es el segundo deporte en el que más apuestas ilegales se realizan, un 40%, solamente por detrás del fútbol que se ubica en primera posición, con un 48%.
Las competiciones de tenis en donde más apuestas ilegales se registran son los «Challengers» y los «Futures», torneos profesionales pero de poca relevancia mediática, en donde muchas de las estrellas del tenis comienzan sus carreras.
Los informes de la ESSA también destacan que «la educación de los jugadores resulta fundamental para combatir este crimen, en concreto, con los jugadores de bajo perfil, como el ruso Andrey Kumantsov, pues son ellos los más vulnerables y los que tienden a desarrollar este tipo de actividad más frecuentemente«.
A este respecto, cabe mencionar que la situación de Andrey Kumantsov se suma a una lista interminable de tenistas sospechosos de apostar en partidos de forma ilegal. Uno de los casos más sonados se produjo en 2007, cuando el tenista argentino Mariano Puerta, quien ya había sido sancionado por dar positivo en exámenes antidoping, fue declarado culpable también de participar en apuestas ilegales. En ese mismo año, nombres de estrellas ATP como Nikolay Davydenko, también se vieron involucrados en amaño de partidos, donde el ex-tenista ucraniano decidió retirarse de un partido contra un rival de bajo nivel, quejándose de dolores en la rodilla, cuando posteriormente se descubrió que había apostado en su propia contra.