Tras multitud de conversaciones acerca de la legalización del juego en las Islas Bermudas, los legisladores completaron el pasado viernes un Proyecto de Ley que será presentado al Parlamento antes de finales de año y que, presumiblemente, será aprobado.
En un discurso ante la Cámara de la Asamblea de las Bermudas, el ministro de Turismo, Shawn Crockwell, definió el proyecto de ley como el «elemento más importante que tenemos para garantizar la mejor estructura administrativa que permita supervisar a la industria local del juego». También comentó que «la decisión de prescindir de un referéndum con anterioridad resultó complicada, sin embargo, las últimas encuestas mostraban que el 76% de los residentes apoyaban la legalización de los casinos«.
«Me siento muy satisfecho por el resultado de esta encuesta, la cual, ha confirmado los resultados de estudio similar que el gobierno realizó en 2013, cuando el 74% de los residentes apoyaron los resorts con casino. El gobierno también ha sido muy tajante con respecto a que los residentes locales serán admitidos en cualquier casino, siempre y cuando cumplan con los criterios que se definirán reglamentariamente«, añadió Crockwell.
Así pues, esta nueva legislación hará referencia a los complejos hoteleros con casino en las Islas Bermudas, por lo que si es finalmente aprobada, sería la primera vez que los casinos son legalizados en un territorio británico del Atlántico Norte. Esta iniciativa es resultado del reconocimiento del Gobierno en lo que respecta a la capacidad de los casinos para promover y mejorar la industria turística, atraer inversores a la isla, y controlar el juego ilegal y el acceso de los menores de edad.
En este caso, se establecería una Comisión de Juegos de Casino y un Consejo de Responsabilidad que establecería ciertas limitaciones en los juegos de casino, por lo tanto, determinados residentes locales, como por ejemplo, los menores y cualquier persona que reciba asistencia financiera, tendrían prohibida la entrada.
«La aplicación de la legislación de juegos de casino en las Bermudas es una declaración de intenciones importante, así como una decisión jurisdiccional que será observada de cerca por nuestros competidores y potenciales inversores en la industria del turismo. Resulta fundamental para la reputación de las Bermudas que dispongamos de nuestra estructura legal de juego lo antes posible, algo a lo que este gobierno se ha comprometido definitivamente«, Crockwell.