Articulaciones. Qué es un condroprotector para perros

Un condroprotector para perros es una sustancia que intenta evitar el deterioro de los cartílagos de las articulaciones. Sus principales compuestos son la glucosamina y el condroitín sulfato (condroitina).

Estas sustancias se utilizan básicamente como complemento en la alimentación de perros de razas grandes y gigantes, ya que al tener un crecimiento muy rápido en sus primeros meses de vida, pueden padecer diversas enfermedades en sus articulaciones debido a que sus músculos y sus huesos ni crecen ni se fortalecen al unísono.

Para prevenir dichos desajustes en su desarrollo y crecimiento, podemos proporcionarle una dieta equilibrada, tanto en composición como en cantidad, teniendo siempre en cuenta que sea rica en proteínas y minerales.

También será aconsejable ejercitarlo de una forma coherente, sin obligarlo a subir y bajar escaleras de forma constante, ya que cuando el perro aún es un cachorro, sus articulaciones pueden deformarse al realizar este tipo de actividad, por lo que será suficiente con que corra a un ritmo moderado y trote con normalidad.

También será necesario ofrecerle un lugar confortable y cómodo, ya que los suelos duros y fríos, como los de los apartamentos, producen un impacto en sus articulaciones que puede agravar sus síntomas con el paso del tiempo.

Las principales enfermedades degenerativas que pueden manifestarse en las articulaciones de un perro, son:

Artritis, consiste en la inflamación de las articulaciones con dolor constante.

Osteoartritis, comúnmente conocida como artrosis, provoca deterioro del cartílago articular y la articulación, la cual, raramente se encuentra inflamada. El dolor cesa con la inactividad.

Displasia de cadera, enfermedad hereditaria y congénita, que presenta una alteración en la unión del hueso de la pelvis y la cabeza femoral, provocando un desgaste prematuro en la articulación y el cartílago articular.

Los síntomas de las dos primeras enfermedades, suelen darse en los perros de más edad, mientras que la displasia, aunque no es visible en el nacimiento, se va desarrollando con el crecimiento del cachorro.