Será el centro penitenciario más moderno y mejor equipado de toda Europa, destinada a aquellos presos de ETA que aboguen por el abandono de la lucha armada. Se localizará en Anclareis de Oca (Álava) y podría estar operativa a finales de este mes.
La cárcel de Nanclares de Oca será inaugurada a finales de este mes. Tras tres meses de funcionamiento, comenzará con el traslado de internos y la tramitación de solicitudes.
Los presos residentes en la actual cárcel de Nanclares serán trasladados a las nuevas instalaciones. Entre ellos, se encuentran un gran número de presos etarras quienes han rechazado, de manera oficial y por escrito, la violencia de ETA.
Es el caso de Idoia López Riaño “La Tigresa”, Francisco Mujika Garmendia “Pakito” o José Luis Álvarez Santacristina “Txelis”.
Según han confirmado Instituciones Penitenciarias, Arnaldo Otegi habría redactado una solicitud de traslado a este nuevo centro a través de sus abogados, sin embargo, dicha petición ha sido temporalmente rechazada, ya que aún no se han abierto los plazos legales para solicitar la inscripción de presos.
Además, si el sentido común se impone, es muy probable que la sentencia condenatoria por pertenencia a banda terrorista desactive cualquier posibilidad de traslado a Nanclares.
Pero veamos cuáles serán las condiciones de vida en este nuevo centro penitenciario “cinco estrellas”.
El centro se organizará en 5 plataformas, presentando una gran avenida central con dos bandas de edificación, donde por la parte la izquierda desde la entrada, se situarán los 12 edificios de la “zona residencial” para presos comunes.
Éstos, se repartirán en 720 celdas dobles, habiendo 8 módulos de 72 celdas y cuatro de 36. La zona más lejana, la de régimen cerrado, estará destinada para presos con condenas de primer grado o que hayan mostrado un comportamiento conflictivo, para ellos, se reservarán 152 celdas individuales.
Las salas médicas poseerán 64 camas y atención continua, de manera que una vez por semana, asistirán médicos especialistas en odontología y radiología. En caso de que se aceptase el traslado de alguna mujer, se tendría que habilitar de forma obligatoria, una consulta ginecológica.
El módulo sociocultural constará de una biblioteca, una sala de lectura y otra sala insonorizada de música, así como de una sala de informática en la que “sólo” habrá conexión a internet para aquellos presos que tengan pendiente un proceso judicial o estén cursando estudios universitarios.
En cuanto al módulo polideportivo, presentará numerosas aulas destinadas a talleres ocupacionales, una peluquería y un gimnasio totalmente equipado con máquinas ligeras y pesadas.
Todas las celdas del centro serán idénticas, las cuales, se ampliaron de 10 a 13 m2, incluyendo un cuarto de baño propio con ducha. Cada celda dispondrá de dos camas ancladas a la pared, dos escritorios y varias estanterías prefabricadas.
Y pese a que los presos “no podrán disfrutar” de ordenador personal en las celdas, sí podrán adquirir una pequeña televisión o radio.