El celo en el gato

El celo en los gatos, tanto en el macho como en la hembra, presenta no sólo una serie de síntomas evidentes en ambos, sino también, un cambio en su actitud diaria, el cual, afectará también a su comportamiento.

Ambos realizarán maullidos fuertes y persistentes, sin embargo, en el caso de la gata, ésta maullará mucho más, frotándose por todas partes para atraer la atención de cualquiera, poniéndose rígida al mínimo gesto de caricia, y adoptando una posición similar a la de la cópula (esta disposición se conoce como lordosis, donde presenta el lomo hundido y la cola desviada lateralmente).

El celo en el gato

Los gatos son capaces de reproducirse a partir de los 8-12 meses de edad, y a diferencia de las gatas, no muestran periodos de celo estacionales, por lo que siempre estarán disponibles para aparearse con cualquier hembra que se muestre receptiva y entre en su territorio.

Una de sus principales actividades durante este periodo consistirá en mantener dicho territorio perfectamente delimitado, para lo cual, irá proyectando orina de forma selectiva, además de rascarse e impregnar con feromonas todos los muebles que se vaya encontrando.

Dichas acciones se complementarás con otros signos de excitación, en los casos en que note la presencia de una gata, como por ejemplo, maullidos insistentes e intensos, temblores, pérdida de apetito, revolcones continuos, etc…

El celo en la gata

En términos generales, el primer celo de una gata tendrá lugar entre los 7 y 9 meses de edad, aunque puede retrasar su aparición hasta el año. La frecuencia y duración del mismo, para desesperación de sus dueños, puede variar enormemente de una gata a otra, en función de múltiples factores tanto físicos como ambientales, como por ejemplo:

– El peso.

– La constitución.

– La predisposición genética.

– El carácter.

– El tipo de clima.

– Las horas de luz diarias.

– La presencia o no de otros gatos o gatas.

En cualquier caso, puede decirse que las gatas presentan, al menos, un par de celos al año, los cuales, suelen coincidir con el inicio de la primavera y del verano, respectivamente, y suelen tener una duración aproximada de 2 semanas, aunque los periodos de fertilidad máxima sean de 24 o 48 horas únicamente.

La esterilización como solución al celo en los gatos

Tanto si se opta por la esterilización quirúrgica (operación) como química (pastillas), será necesario acudir al veterinario, para que estudie el caso y recomiende la mejor opción. En el caso de las hembras, cabe mencionar que la esterilización en las gatas ayuda a reducir el riesgo de tumores mamarios.