El motivo de dicha desobediencia fue la petición, por parte de Rubalcaba, de que Griñán convocara las Elecciones Autonómicas de Andalucía el 20 de noviembre, haciéndolas coincidir con las Elecciones Generales.
Dicha petición fue rechazada por el propio Griñán debido a que, según él, la coincidencia de fecha en ambas convocatorias iría en contra de sus intereses.
Uno de los motivos aducidos por el Presidente de la Junta de Andalucía es que el hecho de convocar los comicios en marzo del 2012, se vería favorecido por los recortes económicos que tienen pensando ejecutar en las Comunidades donde gobierna el PP, y es que dichos recortes, perjudicarían notablemente la intención de voto hacia el Partido Popular.
Según ha confesado Griñán a fuentes cercanas a él: “Sólo tengo opciones de ganar si las elecciones se celebran en marzo”, transmitiendo su idea de “ganar tiempo” y esperar a que “los recortes de los gobiernos autonómicos del PP perjudiquen la candidatura del PP en Andalucía”.
La intención del candidato socialista es convocar las elecciones lo más tarde posible, disponer de un margen de tiempo suficiente para cambiar la opinión en los sondeos y que los votantes, se replanteen su intención de voto, que actualmente, desembocaría en la pérdida de uno de los bastiones socialistas durante toda la democracia.