La mujer que escondió el cadáver de su bebé en el armario ha sido puesta en libertad con cargos

Diana M., la mujer acusada del homicidio de su hijo recién nacido, tras haber sido hallado el cadáver del niño prematuro en la cocina de su vivienda, en el barrio de San Blas (Madrid), ha sido puesta en libertad con cargos.

Además de haber sido puesta en libertad con cargos penales, la mujer tendrá la obligación de mantenerse localizada en todo momento, hasta que concluyan las últimas pruebas forenses, sobre el cuerpo del menor.

La mujer, tras acudir el pasado domingo al Hospital Gregorio Marañón, informó al personal asistente allí, que “había sufrido un aborto tras 24 semanas de gestación y que necesitaba atención urgente”.

Pasadas las horas y una vez de vuelta a su domicilio, fue detenida por la Policía Nacional cuando ésta decidió personarse en la vivienda, alertada por los médicos que la atendieron, ya que en ningún momento, la acusada quiso aclarar dónde se encontraban los restos del recién nacido.

Una vez en la casa, los agentes hallaron el cadáver del bebé en la cocina, envuelto totalmente en plásticos y metido en un armario que la joven empleaba como despensa. Una amiga de la mujer declaró tras ser preguntada, que “no sabía nada del aborto”.

El primer examen realizado este mismo lunes sobre el cuerpo, no ha sido capaz de dictaminar si el pequeño nació muerto o si la muerte se produjo después, ya fuera por causas naturales o por acción u omisión de la progenitora.

Según ha comunicado un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, “el caso ha quedado bajo disposición judicial, donde se determinará si procede convocar a la mujer, para realizar una declaración de lo sucedido”.