Los grandes empresarios españoles han solicitado a UGT y CCOO, principales sindicatos de trabajadores, que no bloqueen los duros recortes económicos que deberá aplicar el nuevo gobierno, para enderezar la economía española, como ya ha ocurrido en Grecia.
La CEOE no cree que los sindicatos españoles “asalten las calles” en forma de protesta, como sí han hecho los griegos.
Según su análisis, los actuales dirigentes de CCOO y UGT son conscientes de que dicha acción, conllevaría a un clima de inestabilidad social y política permanente, el cual, no tendría ninguna salida posible.
Además, a la larga les resultaría contraproducentes, ya que les convertiría en marginales, creando el caldo de cultivo propicio para la aparición de sindicatos minoritarios y extremistas, impropios de un país como la actual España.
Fuentes de la cúpula de la patronal, han asegurado que “resulta prioritario que los sindicatos se reinventen. No deben bajar al barro como los griegos, sino todo lo contrario, prestar su ayuda al complicado cambio que se viene encima”.
“Deben colaborar en la firma del acuerdo y en explicar a los ciudadanos, los sacrificios que debemos compartir y pactar entre todos. No debe repetirse el bloqueo en el diálogo social, que se produjo en la etapa anterior”, añaden.
El nuevo equipo responsable de la CEOE ha mostrado su preocupación, aunque parezca sorprendente, por la renovación estructural de los sindicatos mayoritarios.
“Todavía podemos dialogar con ellos, ya que son necesarios para realizar el difícil cambio al que se avecina el país, con la entrada del nuevo Gobierno”, afirman.
Una vez hemos expuesto la visión de la patronal, respecto a la actitud que deben mostrar los sindicatos frente a los recortes económicos que deberá ejercer el nuevo Gobierno, veamos ahora cuál es la postura adoptada tanto por UGT como por CCOO.
Fuentes próximas al presidente de la CEOE, Joan Rosell, han querido recalcar que “la situación que toca vivir ahora, resulta difícil e histórica, pero que todos aquellos que tenemos responsabilidades, empezando por el nuevo Gobierno y siguiendo por la patronal y los sindicatos, debemos acertar en las medidas que se adopten, dejando los intereses personales a un lado”.
“De modo que es prioritario, aplicar una segunda reforma laboral y liberalizar el mercado de trabajo, equilibrando salarios y productividad, por lo que será necesario alcanzar un consenso”, añaden.
La dirección de la CEOE se muestra confiada en que el buen juicio que han demostrado los sindicatos, en los momentos más críticos, sea empleado ahora también, en su futuro comportamiento respecto a estas reformas.
Por su parte, CC.OO y UGT han decidido guardar silencio al respecto, esperando a que el nuevo gobierno de Rajoy, exponga sus medidas para “salir de la crisis”, en términos que sean “asumibles” por la clase obrera.
Sólo de forma privada, han admitido que “será necesario pactar sacrificios, pero siempre compartidos con toda la sociedad, y que habrá que tratar de hacérselo entender a los trabajadores”.
Los sindicatos han querido aclarar también, que “en España se han pactado acuerdos tremendamente difíciles, en tiempos más duros que los actuales, y que los trabajadores lo han llegado a entender. Pero la patronal tiene que visualizar su necesidad y que no deben ser los únicos que se sacrifiquen, ya que de lo contrario, no aceptarán”.