Qué plantas nos ayudan a repeler las plagas de nuestro jardín

Las plagas de insectos son un gran inconveniente para el desarrollo normal de nuestras plantas y cultivos, sin embargo, no todos son peligrosos, también los hay beneficiosos, por lo tanto, es recomendable que conozcamos las propiedades de determinadas plantas aromáticas que no sólo sirven como repelentes naturales de estos insectos nocivos, sino que también, atraen la presencia de insectos beneficiosos para la polinización y desarrollo de éstas.

Cempasúchil (Tagetes spp)

Además de ser una planta tremendamente asociativa para cultivar en el huerto, es una excelente repelente de insectos nocivos. No obstante, no es recomendable que intentemos frotarla contra nuestro cuerpo, ya que puede provocar irritación en la piel.

Menta de Gato (Nepeta Cataria)

Es una planta trepadora con gran tendencia a sobre extenderse, cuyo efecto como repelente de insectos chupadores es hasta 10 veces más potente que el DEET (principio activo de todos los repelentes de insectos).

Pasto de Limón (Cymbopogon Citratus)

Es una planta tropical, por lo que no soporta las temperaturas excesivamente bajas, además, puede cultivarse a partir de tallos ya desarrollados que se pueden adquirir en cualquier establecimiento especializado, y desprende un fuerte olor a limón que repele la aparición de todo tipo de insectos parasitarios.

Romero (Rosmarinus Officinalis)

El aceite esencial de esta planta es desagradable y nocivo para la mayoría de insectos. Además, es una planta muy atractiva para adornar jardines, así como acompañamiento en diversas recetas de cocina.

Menta (Mentha spp)

Al igual que sucede con el Romero, el aceite de esta planta es muy desagradable para los insectos cavadores, por lo que es recomendable colocarlas en los extremos del jardín o en la orilla de la ventanas.

Ajenjo (Artemisia Absinthium)

Es una planta perenne de color plateado que puede ser cultivada a plena luz del sol y cuyo olor áspero y picante repele eficazmente la presencia de insectos chupadores.