La Tarta de Frutas es una receta muy sencilla de hacer y muy atractiva para los más pequeños de la casa, ya que puede servirse tanto en postre como en merienda, proporcionando una manera creativa y diferente de añadir gran cantidad de fruta en sus hábitos alimentarios.
Ingredientes
– 1 lámina de Masa Quebrada.
– 3 yemas de Huevo.
– 500 ml de Leche.
– 120 g de Azúcar.
– 40 g de Harina de Maíz.
– Ralladura de limón.
– 1 cucharadita de Esencia de Vainilla.
– Varias piezas de Fruta (plátano, fresa, kiwi, melocotón, naranja, etc…).
– 2 cucharadas de Mermelada de Albaricoque.
– 3 cucharadas de Agua.
– 2 hojas de Gelatina.
Elaboración
Comenzamos untando de aceite nuestro molde (si es desmontable mejor, así evitaremos que se nos rompa después), cubriendo todo el interior del mismo con la lámina de masa quebrada. Cuando la tengamos bien extendida, nos ayudaremos con un tenedor para pinchar toda la base, horneándola a 200oC durante unos 15 minutos o bien hasta que veamos que está doradita. Pasado este tiempo, sacaremos el molde con cuidado de no romper la masa ni quemarnos, y lo reservaremos.
Mientras se dora la masa, empezaremos a preparar la crema, para ello, batiremos las yemas de huevo, incorporaremos harina de maíz, y cuando tengamos una masa homogénea, añadiremos 150 ml de leche, mezclándolo todo bien y reservándola.
En una cazuela, verteremos el resto de la leche (350 ml) y añadiremos el azúcar y la ralladura de limón (si queremos no encontrarnos luego la ralladura de limón, podemos echar un cachito de la piel del limón, evitando la parte blanca, para así poder retirarlo más fácil después).
Removeremos para disolver bien el azúcar, y esperaremos que entre en ebullición el conjunto, en ese momento, añadiremos poco a poco la mezcla de las yemas que hemos preparado anteriormente, y removeremos continuamente hasta que espese. Una vez conseguido, dejaremos que se enfríe el preparado.
Mientras esperamos a que se enfríe la crema, lavaremos y pelaremos bien todas las frutas que hayamos escogido, para después trocearlas de diferentes maneras, unas en rodajas, otras en gajos, otras en trocitos, etc…
A continuación, verteremos la crema en la masa quebrada horneada y la repartiremos bien, para después decorar la tarta con los trocitos de fruta que hemos preparado anteriormente. Los colocaremos de manera que quede equilibrada y llamativa, mezclando formas y colores.
Por último y para evitar que la fruta se oxide y nuestra tarta quede brillante, prepararemos un almíbar. Para ello, en un cazo, pondremos a calentar la mermelada con agua, y cuando rompa a hervir, lo separaremos del fuego y añadiremos las hojas de gelatina que previamente hemos tenido en agua fría para que se ablandaran, removiendo hasta que la gelatina se haya desarmado por completo. Ahora, pintaremos la superficie de nuestra tarta con el almíbar ayudándonos de una brocha.
Y por fin, ya tenemos lista nuestra Tarta de Frutas, preparada para degustar cuando queramos.